Cuerpo-Mente- Espíritu - III

Iluminadoras visiones de la conexión cuerpo-mente-espíritu

Sri Chinmoy concentrándose

LA VIDA Y LOS DEPORTES NO PUEDEN separarse; son uno. De hecho, la vida misma es un juego. Este juego puede hacerse extremadamente bien, siempre y cuando el jugador desarrolle consciente o inconscientemente la capacidad para invocar la energía trascendental que está siempre manifestada en la acción.

En el juego de la vida, cada alma está corriendo, consciente o inconscientemente, hacia la meta de la perfección interna. No hay un solo individuo que no haya tomado la salida. Ahora bien, un individuo puede estar detrás de otro en la carrera hacia Dios, pero todos están progresando y corriendo hacia la misma meta.

Cuando entras en la vida espiritual significa que has comenzado de manera consciente tu viaje interior. Si corres conscientemente, como es natural alcanzarás la meta antes que quienes todavía están durmiendo. Tal vez quieres correr hacia la meta porque tienes un intenso llanto interno. Tu llanto interno por la verdad, la luz y el amor, ha aumentado; por lo tanto estás corriendo hacia la meta. ¿Por qué que ha aumentado en ti el llanto interior, mientras que otros están aún profundamente dormidos? Eso es porque Dios te ha inspirado. No sólo es que tú sales de tu casa y decides correr. No, algo dentro de ti, un impulso interno, te inspira a salir y a correr. ¿Y quién te ha dado ese impulso interior sino nuestro Amado Supremo?

Sri Chinmoy caminando

LA ESPIRITUALIDAD ES UN camino de una sola dirección que te lleva hasta tu meta. Una vez que has embarcado en tu viaje, no puedes volver atrás. El punto de partida ha desaparecido. Una vez que la evolución comienza en cualquier plano, no puedes volver al punto inicial. Si estás corriendo conscientemente hacia el objetivo, naturalmente quieres llegar allí lo antes posible. Si quieres correr rápido, más rápido, lo más rápido, tienes que simplificar tu vida externa, tu vida de confusión, tu vida de deseo, tu vida de ansiedad y preocupación. Al mismo tiempo tienes que intensificar tu vida interna, tu vida de aspiración, tu vida de dedicación e iluminación.

La purificación y la iluminación están llamadas a producirse a la Hora elegida por Dios. En ese momento, primero verás que el objetivo está justo delante de ti. Y finalmente llegarás a darte cuenta de que el objetivo no sólo está dentro de ti, sino que tú eres el objetivo mismo. Tu propio ser superior es el objetivo que tu ser inferior ha estado buscando.

UN GRAN CAMPEÓN es el que ve y siente que es un mero instrumento de su Piloto Interno y que su Piloto Interno está corriendo en él y a través de él, conforme a su propia capacidad de receptividad. Un campeón de campeones es aquel cuya vida ha devenido en la Visión de su Absoluto Supremo y cuya vida externa ha devenido en el Canal de la Perfección de su Amado Supremo.

CON EL PODER DE NUESTRA IMAGINACIÓN podemos desafiar a la mente engañosa y vencer. Nos debilitamos imaginando que somos débiles. Por otra parte, podemos fortalecernos imaginando que somos fuertes. Nuestra imaginación nos empuja a menudo a pensar que no podemos hacer algo o decir algo. A menudo utilizamos la imaginación en una dirección errónea. Así pues, en lugar de dejar que la imaginación nos lleve hacia atrás, deberíamos emplearla para que nos lleve adelante, hacia nuestro objetivo.

Niños corriendo relevos.En gran medida, la velocidad en la carrera comienza en la mente. Tienes que desarrollar más imaginación. Imagina que estás corriendo rápido y aprecia tu velocidad. Deja entonces que la alegría y la emoción que obtienes de tu imaginación te inunde. Esta alegría aumentará tu velocidad. También puedes pensar en algunas personas que corren realmente rápido e intentar identificarte con ellas.

MIENTRAS CORRES, no pienses en que eres una persona de veinticinco o treinta años de edad. Piensa que sólo tienes seis o siete años. A los siete años, un niño no se queda sentado, tan sólo corre de un lado para otro. Así pues, imagina el entusiasmo de un niño e identifícate no con el niño sino con la fuente de su entusiasmo. 

Si estás corriendo una distancia larga, identifícate con diez o incluso veinte corredores que están por delante de ti. Tan sólo imagina el modo en que ellos están inhalando y exhalando. Entonces, mientras tú inhalas, siente que estás inspirando su propio aliento y que la energía de los veinte corredores está entrando en ti. Luego, cuando estás exhalando siente que todos esos veinte corredores están exhalando tu cansancio y falta de entusiasmo.

PODEMOS EVITAR que el entrenamiento se vuelva tedioso y aburrido si tenemos en mente que el correr no es otra cosa que una flor recién abierta que estamos colocando a los Pies de nuestro Amado Supremo. Hemos de sentir que esta flor recién abierta es el despertar diario de nuestra alma, una realidad de auto-ofrecimiento que cada día estamos ofreciendo a nuestro Amado Supremo. Si podemos mantener esta experiencia mientras corremos, nunca nos parecerá tedioso o aburrido nuestro entrenamiento.

Sri Chinmoy con Jack Foster

EL MARATÓN ES ÚNICO y permanecerá siempre inigualable entre las carreras de larga distancia.  Así como el maratón es un largo recorrido en el plano externo, también la espiritualidad es un largo, más largo, y largísimo viaje en el plano interno. Tu propia carrera espiritual no tiene nacimiento ni muerte, es infinita. Cuando corres un maratón estás intentando conseguir algo sumamente difícil y arduo en el plano físico. Cuando lo haces, te da alegría, porque te recuerda a lo que estás intentando alcanzar en el plano interno. Así como tienes la determinación de completar la carrera más larga en el plano externo, el maratón, también tienes la determinación de alcanzar la Meta en tu viaje interno. Un viaje siempre te recordará al otro. El viaje externo te recordará a tu viaje interno hacia la realización de Dios y el viaje interno te recordará a tu viaje externo hacia la manifestación de Dios.
 

<< Cuerpo-Mente-Espíritu-II           •          Cuerpo-Mente-Espíritu-IV >>