Sumario: ¿Quieres cambiar el mundo?

Durante esta tercera semana has…

  • Leído los textos recomendados del Manual de Meditación.
  • Practicado los ejercicios recomendados durante un mínimo de diez minutos diarios—preferentemente a la misma hora cada día.
  • Anotado tus experiencias en el diario.

Hace tres semanas que comenzaste. ¿Has notado alguna diferencia en tu manera de actuar a lo largo del día? Revisa los acontecimientos de la semana pasada. ¿Han habido situaciones que solían molestarte, y que ahora no te han afectado tanto? ¿Tienes en general una mayor sensación de paz y equilibrio interno?

Si has notado cambios en tu vida, eso es magnífico; ¡especialmente porque tan sólo acabas de empezar! Si no has notado cambios, no te preocupes; ¡acabas de empezar! En cualquier caso, nuestro consejo es siempre el mismo: medita con regularidad, medita con sinceridad y confía en tu progreso.

¿Quieres cambiar el mundo?

Hasta ahora quizá has compartido tus experiencias de la meditación con amigos y compañeros, para descubrir que algunos no comparten tu entusiasmo. Incluso tal vez alguien te ha dicho que tu deseo de descubrimiento de ti mismo es ‘egoísta’. No lo creas ni por un momento.

Si quieres sinceramente cambiar el mundo, tienes dos opciones: intentar cambiar a todas las demás personas, o cambiarte a ti mismo. Considerando que tienes mucho más control y conocimiento de ti mismo que de los demás, ¿cuál de las propuestas crees que supondrá un empleo más efectivo de tu tiempo y de tu energía?

“¿Quieres cambiar el mundo?
Entonces cambia tú primero.
¿Quieres cambiarte a ti mismo?
Siendo así, permanece en completo silencio
dentro del mar del silencio.”

- Sri Chinmoy  

Hay otra razón para que cambies tú primero: no puedes dar lo que no tienes. Y aunque intentases dar lo que no tienes, no tendría fuerza.

Probablemente no te convencerá mucho un ladrón que te dice que no robes. Pero si alguien a quien consideras un santo te pide que no robes, su pureza, su humildad y su amor entrarán en tu ser y te inspirarán a llevar una vida mejor.

Eso no quiere decir que tengas que alcanzar la santidad antes de intentar ayudar a los demás. ¡No! ¡Si así fuera, nosotros tampoco podríamos haber creado este curso de meditación! Pero, para cambiar el mundo no tienes que salir ahí fuera y hacer algo especial. Simplemente tienes que aspirar a mejorarte, a traer más y más paz dentro de tu ser y a ofrecer tu buena voluntad silenciosamente a los demás. Esto es lo más importante y lo más poderoso que puedes hacer para ayudar a los que te rodean y al mundo en general.

“Progresa tremendamente
y mejora tremendamente
en tu vida interior.
Los demás, sin duda,
serán inspirados por el resultado.”

- Sri Chinmoy